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viernes, 29 de marzo de 2013

ASESINO 7: Marc Dutroux "El monstruo de la dulce Bélgica"; violó y asesinó a niñas pequeñas


NOMBRE: Marc Dutroux

PAÍS: Bélgica

FECHA DE NACIMIENTO: 6 de noviembre de 1956

FECHA DE FALLECIMIENTO: Actualmente vivo

APODOS: El monstruo de la dulce Bélgica

NÚMERO DE VÍCTIMAS: 5

CARGOS JUDICIALES: Secuestro, tortura, abuso sexual a menores y asesinato

CONDENA: Cadena perpetua


Marc Dutroux es el nombre de nuestro séptimo asesino en la web, y del cual vamos a explicar la terrible historia relacionada con él, que conmocionó a un país que de por si, es sumamente tranquilo en lo que a asesinatos se refiere. Bélgica no está acostumbrada a este tipo de delincuentes, y por eso mismo Marc está considerado como el preso más famoso del país del noroeste de la vieja Europa.

Nació en el seno de una familia de profesores, ya que sus dos padres ejercían dicha profesión. Además de Marc, la familia Dutroux cuenta con 4 hermanos más, siendo él el mayor de ellos.

Cuando era apenas un niño, la familia decidió emigrar al Congo Belga, para posteriormente años después, regresar a Bélgica. En el año 1971, los padres de Marc se divorciaron y el joven se quedó a cargo de su madre.

Con tan solo 16 años, Marc decidió independizarse, y se dedicó a la profesión de gigoló, algo que a esas edades como que no es muy normal, quizás ahí está el origen de que años después abusara de niñas pequeñas, quien sabe...


Sin embargo parecía que el joven Marc tenía su cabeza amueblada a pesar de los pesares, ya que con tan solo 19 años se casó con la que fue su primera novia, y además logró formar una familia, teniendo dos retoños con la susodicha primera esposa. Tiempo después se separaría de ella...

A pesar de llevar una vida aparentemente idílica antes de separarse, Marc llevaba una doble vida, y es que comenzó a delinquir robando coches, agresiones varias a personas, y dedicándose al tráfico de estupefacientes. Todo esto vino tras quedarse en paro de su profesión de electricista.

Cuando se divorció de su mujer en 1983, Marc conoció a otra chica de nombre Michelle Martin. Junto a ella los robos de vehículos, tráfico de drogas etc, quedaron en un segundo plano, ya que comenzaron nada más y nada menos, que a capturar niñas por las calles de Bruselas, para abusar sexualmente de ellas y para violarlas. Por estos hechos fueron detenidos y condenados a prisión...


Ya dentro de la cárcel, ambos se casaron y en total tuvieron 3 hijos, no perdieron el tiempo desde luego en la sombra de la cárcel...

A pesar de que la criticada justicia belga le condenó a él a más de 13 años de cárcel por los susodichos abusos comentados anteriormente, solo cumplió 3, por buen comportamiento, y fue puesto en libertad condicional en abril de 1992.

Tras quedar libre la propia madre de Marc, envió una carta a los funcionarios de prisión, indicándoles del peligro que había que su hijo volviera a abusar de otras niñas, como finalmente sucedería...

Marc en un intento aparente de no volver a delinquir, decidió ponerse en manos de un psiquiatra, al cual logró convencer de que no estaba bien de la cabeza, para conseguir de este modo una pensión vitalicia del estado belga. El médico además le recetó pastillas para dormir y para estar relajado, y las mismas las utilizó posteriormente para drogar a niñas y así poder abusar de ellas.

Marc Dutroux a estas alturas aparte de ser un pederasta, ya era todo un depredador sexual de menores de edad.

Por cierto, otra cosa que no hemos incluido antes sobre su biografía, es que la policía sospechaba de él en relación a los robos de coches, tráfico de drogas etc, ya que a pesar de que en Charleroi en aquella época había un índice de pobreza bastante notable, él vivía en mansiones, tenía coches lujosos etc etc, ahí queda el dato.


En una de estas casas lujosas que hemos comentado anteriormente, Marc construyó lo que se consideró como una especie de mazmorra, en la cual secuestró, encerró y torturó a las niñas más pequeñas de todas las que capturaba.

A continuación vamos a exponer algunos de los hechos probados, dentro de las acusaciones formuladas por la fiscalía de Bélgica... en ningún caso vamos a poner los nombres de las víctimas, al tratarse en el momento de los hechos de menores de edad.

- Dos niñas de 8 años de edad fueron secuestradas por Marc en 1995, para luego introducirlas en la celda que él mismo había construido en la casa comentada anteriormente, y en su interior abusó sexualmente de ellas de forma repetida, y además grabó las terribles secuencias en video.

- Dos niñas de 17 y 19 años de edad respectivamente, fueron secuestradas por un cómplice de Marc, cuando estas estaban de excursión. A ambas las encadenó en una de las camas de la casa a modo de tortura, y semanas después las asesinó a las dos. Todo esto repetimos con ayuda de un cómplice al cual le pagaba los trabajitos con drogas.

- En medio de estos terribles hechos todavía desconocidos por la policía de Bélgica, a pesar de los antecedentes de Marc, fue detenido por el robo de coches lujosos, y estuvo en prisión 3 meses. Durante esos 3 meses, las dos primeras niñas de 8 años que se encontraban en la especie de mazmorra construida por Marc, fallecieron por desnutrición.

- Tiempo después de ser puesto en libertad, él y su cómplice volvieron a las andadas, y en este caso le tocó el desgraciado turno a una niña de 12 años de edad, la cual fue secuestrada y llevada a la mazmorra. 

- Dos meses después de lo anterior, volvieron a secuestrar a una niña de 14 años de edad, cuando volvía a casa por la noche tras una jornada de piscina, la cual también acabó en el interior de la celda casera.

A raíz de que la familia de esta última niña, presentara la correspondiente denuncia, la policía comenzó a investigar, y lograron dar con un testigo que aseguraba haber visto un vehículo por la zona, y recordaba el número de la matrícula del mismo.

Marc, su cómplice y su mujer Michelle Martin, fueron nuevamente detenidos en agosto de 1996.


Tras una cadena de errores inexplicables por parte de los investigadores, fue el propio Marc el que confesó sus crímenes, y puso en conocimiento de la policía sobre la existencia de una mazmorra en el sótano de una de las casas de lujo que el pederasta había construido.

Cuando la policía llegó al lugar, rescataron con vida a las dos niñas de 12 y 14 años de edad, que habían sido torturadas por "El monstruo de la dulce Bélgica".


Sabine Dardenne de la cual si vamos a ofrecer su identidad a modo de homenaje, contó a los medios de comunicación años después de ser liberada por la policía, los pormenores que vivió junto a Marc Dutroux, mostrando una capacidad impresionante de supervivencia a pesar que en el momento de los hechos, solo tenía 12 años de edad. Ella es considerada como una heroína, por aguantar todo lo que tuvo que aguantar en el interior de aquella oscura y terrible celda.

Marc la engañó en todo momento, y le hizo creer que ella había sido secuestrada por un gángster, y que él mismo había pedido un rescate a su familia, para poder liberarla. Marc le contó así mismo, que la familia le había dicho al falso gángster, que no iban a pagar el rescate.

Le contó también, que el gángster estaba muy enfadado por no recibir el dinero de la familia, y que estaba planeando matarla. A pesar de todo esto, Sabine aguantó estoicamente, y su psique no se vio afectada, demostrando una entereza como persona realmente asombrosa para una niña de su edad.

Ella en sus declaraciones a los medios de comunicación, comentó que Marc le había prometido que junto a él no le iba a pasar nada malo, pero a cambio le exigía favores sexuales.

Toda una trama y una historia, montada por este depredador sexual sin escrúpulos, con el único fin de abusar sexualmente de la muchacha.


Las confesiones de este monstruo continuaron, y envió a la policía a un lugar en otra de sus casas, donde había enterrado a otro de sus cómplices, Bernard Weinstein.

El asesinato de este fue terrible, a pesar de que como cómplice su actuación fuese también absolutamente repugnante.

Marc apretó los testículos de Bernard hasta literalmente reventárselos, ya que el mismo no quería decirle a Marc donde había un dinero que él mismo había escondido. Tras reventar sus partes pudendas, Marc drogó con las pastillas a Bernard, y lo enterró vivo en el jardín de la casa. Os podéis imaginar que sucedería cuando el cómplice se despertara 20 metros bajo tierra...


Tras una serie de protestas en la calles de Bélgica, por los continuos errores policiales durante las investigaciones, llegando incluso a registrar la casa donde las dos niñas de 8 años estaban aún vivas y no localizarlas, llegó el momento del esperado juicio, donde todo el pueblo pedía la pena máxima para este depredador de niñas.

Durante el mismo juicio, se supo que Marc había también violado a 3 niñas en Eslovaquia, en una de las escapadas que hizo para vender coches robados en el país vecino de la República Checa.

El 17 de junio de 2004, Marc Dutroux y su mujer además de algunos otros implicados más, fueron condenados por el jurado, y a Marc le cayó cadena perpetua. Él mismo en su defensa dijo que él pertenecía a una organización pedófila europea, en la cual además de él habían policías, médicos, empresarios y hasta miembros del gobierno de Bélgica.

Algunas personas defienden esta teoría del asesino y pederasta todavía a día de hoy, lo que conocemos como "teorías de la conspiración".



Como anécdotas y ya para finalizar, comentamos que tras estos terribles sucesos, muchos belgas que se apellidaban "Dutroux", decidieron cambiar sus apellidos para no llevar el mismo que el de "El monstruo de la dulce Bélgica".

A día de hoy Marc obviamente sigue encarcelado, en una celda de aislamiento en la cual cada 7 minutos se enciende una luz automática, para que los funcionarios de prisiones comprueben que no se ha escapado y que está en buen estado de salud.

La verdad que la tranquila Bélgica, nunca podrá olvidar estos terribles hechos.


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